Policiales Sin indicios sobre nene desaparecido

Caso Loan: apareció una inédita foto del almuerzo y empieza nueva etapa judicial

En la imagen la abuela del chico aparece brindando con la pareja que ahora está presa por el caso. Este lunes a la noche vence el secreto de sumario impuesto por la jueza federal Cristina Pozzer Penzo.

15 de Julio de 2024
La foto inédita del almuerzo Clarín

La causa que investiga qué pasó con Loan Danilo Peña, el nene de 5 años que desapareció el 13 de junio pasado en el pueblo correntino de 9 de Julio, transitará partir de hoy una nueva etapa judicial: termina el secreto de sumario dictado por las autoridades que lideran la instrucción del expediente.

 

Mientras tanto, el diario Clarín difundió una foto inédita del almuerzo en la casa de la abuela del chico, Catalina Peña (86), donde aparece brindando con la pareja que ahora está presa por el caso: el marino retirado Carlos Guido Pérez (62) y la ex funcionaria municipal María Victoria Caillava (52).

 

Seis de los imputados con prisión preventiva fueron citados por la Justicia a declarar en indagatoria, o ampliar su versión de los hechos, sospechados de haber participado del posible delito “sustracción de un menor con fines de explotación”.

 

El expediente Loan está caratulado como “FCT 2157/24. Caso Número 134944/2024. Autos: Imputado: Benítez, Bernardino Antonio y Otros S/Averiguación de Delito”.

 

Según consta allí, el hermano mayor de Loan, Mariano Peña (26), se presentó a declarar en la comisaría de 9 de Julio el 17 de junio. Entonces afirmó que no bien se enteró de que Loan estaba “perdido” -el mismo jueves 13 de junio- fue al campo de su abuela a ayudar en la búsqueda.

 

Con ese objetivo visitó una propiedad vecina, a la que nombró como “lo de Chamorro”. Allí se encontró con un señor de apellido Rodríguez, “oriundo de Santa Lucía, Corrientes”, que le aseguró que su tía Laudelina le había contado qué había pasado con su hermano: “Laudelina me dijo que a tu hermano lo vendió tu mamá”, aseguró Mariano Peña que le contó aquel vecino. Consta en actas. Y repitió: “Sus palabras fueron esas, que mi tía le dijo ‘la mamá lo vendió´”.

 

El hermano de Loan le pidió al oficial de Policía que le tomó la declaración que tuviera en cuenta que él consideraba esa versión como una “mentira total”, e insistió, varias veces, que sospechaba de su tía Laudelina, y también de su prima Camila Núñez (hija de ésta última), debido a que “las dos estaban con Loan cuando dicen que se perdió”.

 

En ese momento, la investigación policial sobre el paradero de Loan la lideraba el comisario Walter Maciel (43), hoy preso por “encubrimiento”.

 

Los botines

De acuerdo con las pericias de los teléfonos de los imputados en el caso, la Justicia determinó que Macarena Peña (21), hija de Laudelina y prima de Loan, le escribió un mensaje de WhatsApp a su madre el viernes 17 de junio, en el que le informó que había encontrado el botín derecho que tenía su primo cuando “se perdió”.

 

Ese chat fue recibido y leído por Laudelina, pero ella lo borró de su celular. Los expertos de la Policía Federal pudieron recuperarlo. Consta en el expediente.

 

Los investigadores encontraron el segundo botín de Loan. Macarena Peña, igual que su mamá, omitió hablar de este punto cuando declararon en sede judicial, más allá de que afirmaban estar preocupadas por conocer el verdadero paradero de Loan.

 

Con todo, es un hecho que la comunicación entre la hija y la madre existió y que ese chat incluyó una foto de un calzado muy similar a los botines que tenía Loan durante el almuerzo en casa de su abuela. No es el mismo botín que, de acuerdo con la Justicia, su tía Laudelina “plantó” en un lodazal, delito que ella misma habría confesado, agregando que el comisario Maciel estaba al tanto de la maniobra.

 

En este segundo caso, el botín fotografiado era el correspondiente a un pie izquierdo. Nunca se peritó ni se lo encontró de modo oficial.

 

Contradicciones de Caillava y Pérez

María Victoria Caillava, la ex funcionaria municipal presa por ser la posible coautora de la sustracción de Loan, tuvo un ataque de nervios la noche en la que ella misma denunció el extravío del niño.

 

En su declaración a la Justicia de Corrientes, Caillava -y su marido, el también detenido Carlos Pérez- le ocultó a la Justicia ese dato, inofensivo en principio, pero llamativo si es que los protagonistas evitaron darlo a conocer.

 

En su exposición ante los primeros fiscales de la causa (Juan Carlos Castillo y Guillermo Barry), la funcionaria y el marino aseguraron que, una vez confirmada la desaparición de Loan, volvieron desde su casa al campo de la abuela Catalina para sumarse a la búsqueda del niño.

 

Los dos afirmaron que esa tarea los ocupó hasta el final de la noche. Luego se comprobó que, en realidad, hacia la diez de la noche la pareja se retiró del lugar para llegar a las apuradas al hospital de 9 de Julio.

 

Caillava, según el libro de actas del hospital, tenía un ataque de tos. Después se comprobó que, en realidad, hacia las 22 como máximo, ambos ya habían vuelto del campo a 9 de Julio. A las 23.05, Caillava fue atendida en el hospital del pueblo donde, según un registro firmado por una enfermera, le aplicaron una inyección con corticoides.

 

La Justicia confirmó que lo que le inyectaron a Caillava fue un calmante por vía endovenosa, ya que sufría una crisis nerviosa. La enfermera que la había atendido admitió que era amiga de la ex funcionaria.

 

La pareja acusada de haber tenido un supuesto rol protagónico en la sustracción de Loan viajó en su Ford Ka a la provincia de Chaco el día siguiente al de la desaparición del chico correntino.

 

Las pericias con perros entrenados determinaron que el propio Loan o ropa de Loan pudieron haber estado dentro de ese vehículo. El matrimonio explicó con detalles a la Justicia lo que ambos hicieron en ese viaje a Chaco, con parada en la capital de Corrientes. Eso pasó el 17 de junio. Lo que ocultaron es que Pérez volvió a viajar a Resistencia el 18 de junio, esta vez sin su esposa.

 

Según los chats extraídos de su celular, viajó para llevar a su hija a su casa en Chaco. Es lo que él le cuenta a Caillava en los mensajes. Lo que se desconocía es que tanto él como ella realizaron otro viaje más en ese Ford Ka. Fueron a la ciudad de Goya el 20 de junio, un día antes de ser detenidos.

 

El ex marino Pérez tomó extrañas “precauciones”. De acuerdo con las pericias a su teléfono, le envió varios mensajes de audio de WhatsApp al comisario Maciel.

 

Pérez le pidió al policía una custodia para su casa, debido a que temía ser objetivo de alguna protesta de sus vecinos. Y también le pidió “permiso” para dejar estacionada frente a la comisaría a su camioneta Ford Ranger blanca. Lo llamativo es el motivo: el ex marino le adelantó al policía que buscaba evitar así que desconocidos “me planten pruebas” sobre Loan, a pesar de que él afirmaba que estaba perdido. El comisario aceptó todos los pedidos de Pérez.

 

Una vez confirmado que su camioneta sería “custodiada” (no se probó si esto había ocurrido en realidad), el ex capitán de navío le mandó un mensaje de chat a su esposa, apurado: “Alistate, nos vamos ya para Goya”. Ella le respondió que estaba lista.

 

La Justicia comprobó que ambos usaron el Ford Ka para ir hasta la ciudad de Goya. ¿Qué hicieron allí? Secreto de sumario, dice el informe del diario Clarín.

 

Mensajes de la ex funcionaria

Caillava, antes de caer presa por el caso Loan, le aseguró a TN, en compañía de su esposo, que estaba convencida que le “plantarían pruebas” para comprometerla en la causa.

 

En un tramo de uno de los reportajes que le dio a ese canal de noticias, la ex funcionaria soltó una posible explicación para sus “desgracias”: “Me pasa por ser informante de la Policía en casos de narcotráfico”.

 

¿Caillava decía la verdad respecto a su posible labor como agente encubierta de Inteligencia de la Policía? Aunque parezca extraño, entre los chats extraídos de su celular, se detectaron mensajes escritos y de voz que ella intercambió con un oficial de la policía que trabaja en una provincia que no es Corrientes, y que le pide información sobre un objetivo que, según le contó, estaba bajo investigación en un caso de delitos federales.

 

 

Esas comunicaciones entre el policía y la ex funcionaria existieron, y autoridades políticas que conocen la trama del caso Loan admitieron que había un nexo “reservado” entre ella y el agente que le escribió para pedirle información vinculada a su conocimiento de 9 de Julio.

 

El nombre de ese agente no se identificará porque está en funciones. Tampoco la información puntual que le aportó Caillava.