En búsqueda de su séptima Libertadores, Boca arrancó su sueño en Chile. Y el estreno fue el ideal, ya que se trajo sus primeros tres puntos gracias al 2-0 conseguido ante Palestino en Santiago. De esta forma, lidera el grupo 5 con Wanderers, al que enfrentará el jueves 26 en la Bombonera.

Boca no la pasó bien a lo largo del primer tiempo. Porque careció de juego asociado, abusó del pelotazo y sufrió los ataques por las bandas de Palestino, sin precisión en los metros finales. Gago se encontró muy solo a la hora de generar juego. Pese a este panorama adverso, encontró una luz en el camino: luego de que Torsgilieri se perdiera una clarita tras un córner, Chávez, parado bien de contra al igual que el pibe Palacios, aprovechó un desajuste de la defensa local, muy permeable, y la definió de excelente manera ante la salida del arquero Melo.

Obligado, el equipo de Guede trató de llegar al empate en el ST. Si bien siguió haciendo daño por las bandas ante un Boca destinado a aguantar y salir rápido de contra, nunca tuvo efectividad. Abusó de los centros, mal ejecutados o desviados por los centrales visitantes, de buena performance. El partido estaba a pedir de una respuesta rápída para los de Arruabarrena. Y de esa forma arribó el 2-0: pase de Lodeiro, que entró por un desdibujado Gigliotti, para Palacios, que continuó dulce luego de los goles a Olimpo por el torneo local. Colazo y Orion, salvando dos pelotas que iban al arco, se vistieron de héroes en los siguientes minutos ante los últimos intentos del cuadro local.

Primer paso positivo para los del Vasco, que van por otra estrella a nivel continental. Ahora, a pensar en el certamen doméstico, en donde enfrentará a Temperley el próximo domingo.