Rodolfo Arruabarrena no pierde la tranquilidad el día después de la disputa de su primer Superclásico como técnico, pese a que Boca empató 1 a 1 con River en el Monumental y dejó escapar una inmensa chance de prenderse firmemente en la pelea por el título. El Vasco no tuvo reparos en analizar que "ellos valoran el punto más que nosotros debido a que siguen invictos y en la punta del campeonato", en contraposición a lo razonado por Marcelo Gallardo.

A su vez, el ex entrenador de Tigre se opuso a las versiones que hablaban de una ventaja para el Xeneize el hecho de jugar el partido sobre un terreno completamente anegado por la tremenda cantidad de agua caída desde varias horas antes: "Eso pasa por un tema de historia, donde Boca ha sabido adaptarse mejor que River. Pero ahora no era así, a nosotros nos gusta jugar con el campo en buenas condiciones", manifestó.

Ahora que pasó el duelo tan importante para el fútbol argentino, desvirtuado por las condiciones climáticas, el entrenador reveló cuáles eran las claves para obtener la victoria. "Ambos equipos buscamos las espaldas de los defensores, un error o sacar provecho de una pelota parada", enumeró. En tanto, también se encargó de contar que en caso de jugarse en circunstancias normales, "hubiéramos buscado sacar ventaja con la velocidad de los de arriba y la subida de los laterales, debido a que River presiona muy arriba con sus volantes".

Más allá de la bronca por la jugada que cambió el encuentro por completo (penal y roja a Fernando Gago), Arruabarrena bajó los decibeles de la polémica y de cierta manera se solidarizó con la terna arbitral: "Yo estaba caliente, pero todos nos equivocamos. Era todo difícil para ellos, habría que ponerse en su lugar. Fui a hablar con él al vestuario para sacarme las dudas, si él había sancionado el penal y por qué sacó la roja. Ya está, ya pasó", expresó.

Recordando la acción que tuvo a Germán Pezzella como héroe de local, el DT dejó en claro que "sabíamos que tener cuidado con los centros y más con él porque va bien de arriba", para después dar a conocer que "lo único que me lamento es no haber puesto al Chiqui Pérez un minuto antes".

Además, Arruabarrena blanqueó que "para mí las figuras fueron Meli, Chávez, Magallán y Pezzella", para después advertir que su equipo no se despidió de la posibilidad de pelear el torneo. "No debemos bajar los brazos, quedan 27 puntos en juego y es un montón. Sabemos que en la Copa, si hacemos las cosas bien, dependemos de nosotros, pero los de arriba tienen un trajín importante y todo puede pasar", se ilusionó.

Para finalizar, se quejó porque "los jugadores que son los verdaderos protagonistas no tienen peso para tomar decisiones sobre empezar un partido o no ante esas condiciones" y deseó que "se pueda aprender de estas cosas para tener mejores espectáculos".