Patronato estaba teniendo una buena actuación en Avellaneda, donde se imponía por 1 a 0 ante Independiente, pero a los 45 minutos del primer tiempo, el árbitro del encuentro, Patricio Loustau, vio un supuesto golpe de Walter Andrade contra Germán Denis, expulsó al defensor del Rojinegro y sancionó penal para el elenco local, una decisión que terminó cambiando el rumbo del partido, donde el elenco de Forestello cayó por 2 a 1.

Acerca de está polémica habló uno de los protagonistas, Water Andrade, que en una entrevista concedida al programa <b>Buenas Noches</b>, de <b>Canal Once</b>, dejó sus sensaciones sobre lo ocurrido.

"Nunca tuve intenciones de pegar, me acuso de eso y me termina expulsando", comenzó su relato el Negro. "Cuando cobra penal y saca las tarjetas yo decía: '¿Qué va a sacar, amarilla o roja?', no entendía que había visto; me saca amarilla, me saca la roja y tampoco entendía, ¿por qué si me acusaba de que le había pegado una trompada, y él estaba con tanta seguridad, me saca amarilla?", expresó el defensor del Patrón.

Luego, el zaguero del elenco paranaense analizó lo hecho por el colegiado y las consciencias que tuvo en el resultado final: "Se equivocó, él lo supo, ya cuando entró en el segundo tiempo sabía que se había mandado una macana grande, pero ya había cometido el error. Fue muy protagonista en el desarrollo del partido", aseguró Walter, y agregó: "Con diez hombres se nos hizo muy complicado hacer el mismo partido que en el primer tiempo, y lamentablemente nos quedamos con las manos vacías".

No es la primera vez que Loustau dirige a Patronato ante un grande del fútbol argentino. El mismo juez fue el encargado de controlar las acciones en el encuentro entre el Rojinegro y San Lorenzo, por la primera fecha del campeonato. Andrade recordó aquel cotejo, donde el colegiado había tomado decisiones favorables al conjunto Azulgrana. Al respecto, el Negro señaló: "Se nota un poco que cuando te enfrentas a un grande apenas rozas y enseguida te cobran full, o es mucho más fácil sacar amarilla. Estas un poco mas expuesto a que el análisis no sea justo, no sea igual para los dos. Lamentablemente se está dando así y lo estamos padeciendo".

Consultado nuevamente sobre la actuación del árbitro en el choque frente a Independiente, y puntualmente, por su primera amonestación, que fue por protestar, el central del Santo indicó: "Esa amarilla me condicionó. Cuando me amonestó ya olfateé algo raro, porque faltaban 80 minutos y tenía que aguantar todo el partido con una amarilla encima. Son detalles que hacen al desarrollo de un partido, y cuando enfrentas a un grande normalmente tienen una ventaja".

Más tarde, el defensor habló sobre el funcionamiento del equipo en el duelo ante el Rojo, y el enojo que genero en el plantel no haber podido irse de Avellaneda con los tres puntos, cuando se estaba realizando un buen trabajo. "Nos volvimos masticando bronca, por la situación, porque estábamos haciendo un partido muy prolijo, estábamos muy concentrados, íbamos 1 a 0 arriba, sentíamos que estábamos muy bien y se nos cayó todo, y no por culpa nuestra. Dominábamos el partido y una decisión del referí nos dejó con las manos vacías y con una sensación de impotencia", manifestó.

Finalmente, Andrade se lamentó por que la expulsión le impedirá estar presente en el próximo compromiso de Patronato, que será como local frente a River. "Lo peor es que me pierdo un partido que es hermoso para jugarlo, en mi cancha, con mi gente. Un grande de la argentina que va a pisar el Grella, pero bueno, trato de buscarle el lado positivo y no hacerme la cabeza que me voy a perder un partido trascendental, por que te amarga", concluyó el Negro.