Parecía que nunca iba a llegar este momento. Que la 'malaria' no se iba a poder romper. Los europeos, que con soltura conquistaron este continente con sus armas en allá lejos por el 1500, no pudieron repetir en el fútbol, al menos hasta este 2014. 20 Copas del Mundo debieron disputarse para que una Selección de ese suelo pise fuerte en América.
En el octavo Mundial por estos pagos, Alemania logró romper esa especie de maldición y venció a Argentina para conseguir que un país europeo pueda levantar la Copa del Mundo por primera vez. La dividida Checoslovaquia, Holanda, la extinta Alemania Federal e Italia, en dos ocasiones, lo intentaron sin éxito anteriormente. En sólo dos ocasiones –1930 y 1950– la Final fue entre dos americanos, el resto, el decisivo se definió entre un 'local' y uno de Europa.
Por eso la alegría para los 'teutones' es doble tras vencer a los nuestros en el 'Maracaná'. No sólo se 'vengaron' de la Final en México 1986, sino que repitieron la historia de Italia 1990 y alcanzaron su cuarto título en ocho finales jugadas, para cortar la racha.
Su continente entero festeja porque rompieron esa 'condena' que pesaba por estos lados, que comenzó el Mundial de Chile en 1962. Las dos Copas del Mundo anteriores en el continente habían tenido equipos americanos en los definitorios: Uruguay 1930 (Final: Argentina-Uruguay) y Brasil 1950 (aunque no fue Final, terminó definiendo el cuadrangular Brasil-Uruguay; Suecia y España llegaron a la última fecha sin posibilidades de alzar el trofeo).
El Julies Rimet, trofeo que se entregó entre 1930 y 1970, cuando Brasil se lo apoderó de manera definitiva, visitó el segundo continente más grande del planeta en cuatro ocasiones: además del 30 y 50, lo hizo en el 62 (Brasil goleó 3-1 a Checoslovaquia) y en México 70 (la 'Canarinha', que quedó en la historia como uno de los mejores equipos, vapuleó a Italia 4-1).
Luego, la renovada Copa del Mundo, también estuvo en otras cuatro oportunidades. Primero en Argentina, durante 1978, cuando la Selección de César Luis Menotti consiguió su primer título al vencer a Holanda 3-1 con el 'doblete' de Mario Alberto Kempes y el tanto de Daniel Bertoni. La 'maldición' se prolongaba. En México 1986 la 'Albiceleste' repetiría la historia, pero su víctima de ese momento fue Alemania Federal, a quien superó 3-2.
Brasil cerraría la exitosa historia en nuestro lado del mundo cuando en Estados Unidos 1994, la tierra del 'Soccer', se apoderaría del título tras vencer por penales a Italia en el cotejo definitorio disputado en Los Ángeles. Esta vez, Alemania se vengó y en Brasil 2014, en el mítico 'Maracaná', no sintió el peso de ser 'visitante' y rompió los pronósticos.